En diálogo con Aries, la abogada Sandra Domene, representante de una de las víctimas, describió la estructura delictiva que investiga la Justicia Federal de Salta como “una telaraña que captaba y envolvía a las adolescentes”.
“Es una red, y por ende van a seguir surgiendo personas y víctimas más que se van atreviendo a hablar”, afirmó la letrada, quien explicó que las jóvenes eran contactadas por conocidos y, a cambio de dinero, se las incitaba a acercar a otras compañeras.
Domene contó que a su representada “le costó contarle a su madre lo que estaba pasando”, y destacó el acompañamiento que brindó la Justicia Federal:
“La justicia llegó a esta joven y la acompañó hasta que pudo hablar con su mamá y contarle toda esta situación”.
La abogada sostuvo que los imputados “se manejaban con total impunidad” y que el caso representa “una verdadera esclavitud moderna”.
Según su testimonio, la red no solo operaba en las inmediaciones de colegios, sino que extendía su alcance mediante vínculos personales y económicos. Domene dijo que las víctimas eran manipuladas y utilizadas para captar a otras adolescentes.
“Fue una telaraña que los iba envolviendo. Uno llevaba al otro, y así fueron armando la red”, expresó la abogada.
La causa se investiga bajo las figuras de trata de personas, corrupción de menores, abuso sexual con acceso carnal y asociación ilícita, y continúa bajo secreto de sumario.